El Índice de Producción Industrial (IPI) minero registró un crecimiento del 2,3% interanual durante marzo de 2025, consolidando una expansión del 2,2% acumulado durante el primer trimestre del año. Estos datos reflejan la resiliencia del sector extractivo como uno de los pilares de la recuperación económica argentina, destacándose especialmente la actividad hidrocarburífera y la minería no metálica.
Entre los subsectores con mejor desempeño sobresale la producción de petróleo crudo con un incremento del 10,4% respecto al mismo mes del año anterior, impulsada principalmente por los desarrollos en Vaca Muerta. También mostraron un comportamiento positivo la extracción de arenas para fracking (+20%) y los minerales para la industria química (+36,5%). Particularmente notable fue el avance del litio, que registró un salto del 53,4% interanual, consolidando a Argentina como uno de los principales productores mundiales de este mineral estratégico para la transición energética.
En contraste con estos resultados favorables, algunos segmentos experimentaron contracciones, como la producción de gas natural que cayó un 1,2% interanual, y los servicios petroleros que registraron un descenso más pronunciado del 10,7%. Esta divergencia en el desempeño sectorial refleja los diferentes desafíos y oportunidades que enfrenta la industria extractiva en el país, donde las inversiones se concentran selectivamente en los proyectos de mayor rentabilidad y potencial exportador.