Nvidia ($NVDA) presentó resultados del tercer trimestre que superaron las expectativas del mercado, proyectando ingresos de $65.000 millones para el cuarto trimestre fiscal, cifra que excede el consenso de analistas situado en $61.660 millones. El reporte disipó temporalmente los temores sobre una posible burbuja en el sector de inteligencia artificial, impulsando las acciones de la compañía en el horario extendido de operaciones.
El CEO Jensen Huang reiteró que la empresa mantiene órdenes por USD 500.000 millones en chips avanzados hasta 2026, destacando la presencia de su arquitectura en diversos entornos tecnológicos. Con un margen bruto proyectado en el rango medio del 70% para el año fiscal 2027, Nvidia busca validar que la inversión masiva en infraestructura tecnológica está respaldada por fundamentales robustos y no únicamente por especulación del mercado.
Sin embargo, el análisis detallado de la composición de ingresos revela riesgos de concentración latentes: el 61% de las ventas del trimestre provinieron de solo cuatro clientes principales, un aumento respecto al 56% del trimestre previo. Esta concentración intensifica el escrutinio sobre la sostenibilidad del gasto de capital (Capex) de los hyperscalers como Microsoft y Amazon. Además, analistas advierten sobre una posible «economía circular» y señalan que cuellos de botella físicos, como la disponibilidad de energía y espacio en centros de datos, podrían actuar como un freno exógeno al crecimiento hacia 2026, independientemente de la demanda de GPUs.

