Las acciones estadounidenses lograron recuperar terreno significativo en la última sesión, con el S&P 500 registrando un avance del 0,72% y el Nasdaq ganando un 0,77%. El índice Dow Jones Industrial Average lideró las subas con un sólido incremento del 0,91%, impulsado principalmente por los resultados corporativos mejor de lo esperado de Honeywell y Pfizer, cuyas acciones escalaron más del 5% y 4% respectivamente, revirtiendo parcialmente las pérdidas acumuladas en las jornadas previas.
El sector tecnológico también exhibió un desempeño positivo, con particular fortaleza en las empresas de software que continúan mostrando resiliencia frente a un contexto macroeconómico desafiante. En paralelo, el rendimiento del bono del Tesoro a 10 años (UST10Y) experimentó una caída de 5 puntos básicos, ubicándose en 4,17%, su nivel más bajo en tres semanas. Esta reducción en los rendimientos respondió principalmente al deterioro en las perspectivas macroeconómicas, reforzando las expectativas de que la Reserva Federal podría verse forzada a implementar recortes de tasas más agresivos durante el transcurso del año.
En el mercado de futuros, los operadores ya descuentan reducciones acumuladas de hasta 100 puntos básicos en la tasa de referencia para 2025, a pesar de las reiteradas advertencias del organismo monetario sobre los potenciales riesgos inflacionarios que podrían generar los nuevos aranceles aplicados a bienes y servicios importados. En otro frente, el Tesoro de Estados Unidos sorprendió a los mercados al elevar inesperadamente su plan de endeudamiento para el segundo trimestre, contradiciendo las expectativas de ajuste fiscal bajo la administración Trump. Esta decisión impactó positivamente en los mercados de deuda corporativa, con los bonos Investment Grade, High Yield y de economías emergentes avanzando aproximadamente un 0,1%.
