Los principales índices de Wall Street cerraron en terreno positivo, con el Dow Jones liderando las subas con un avance del 1,1%, seguido por el S&P 500 con 0,3% y el Nasdaq con 0,1%. Esta performance refleja un optimismo moderado en el mercado estadounidense, con una clara preferencia por valores tradicionales por sobre tecnológicas.
En el mercado de bonos, los rendimientos de los Treasuries retrocedieron a lo largo de toda la curva de rendimientos. Tanto los plazos cortos como los largos cayeron 5 puntos básicos, dejando la tasa a 10 años en 4,24% y la de 2 años en 3,68%. Esta compresión de rendimientos refleja las crecientes expectativas de recortes de tasas por parte de la Reserva Federal.
La divergencia en el desempeño de los índices muestra cómo los inversores están rotando hacia sectores más sensibles a la política monetaria, favoreciendo valores industriales y financieros por sobre tecnológicas. El retroceso en los rendimientos de los bonos del Tesoro confirma que el mercado está descontando un cambio en la postura de la Fed, con los inversores posicionándose para un entorno de tasas más bajas. Esta dinámica sugiere que el mercado está anticipando no solo el inicio de los recortes de tasas, sino también su continuidad en los próximos meses.