Los mercados estadounidenses experimentan un fuerte impulso positivo tras las recientes declaraciones del presidente Donald Trump, quien anunció que los aranceles a China no se mantendrán en los niveles actuales y descartó adoptar una postura excesivamente dura hacia el gigante asiático. Adicionalmente, el mandatario aclaró que no tiene intenciones de remover a Jerome Powell de su cargo al frente de la Reserva Federal, disipando así uno de los principales factores de incertidumbre que pesaban sobre los mercados financieros.
En este contexto, los futuros del S&P 500 y del Nasdaq registran avances del 2,3% y 2,8% respectivamente, mientras que el índice dólar (DXY) revierte su tendencia bajista con un incremento del 0,18% hasta 99,1 puntos. El optimismo también se refleja en el mercado de renta fija, donde las tasas de los bonos del Tesoro a 10 y 30 años caen 11,7 y 14,4 puntos básicos, respectivamente, lo que representa un alivio para los activos de riesgo a nivel global.
La jornada anterior ya había mostrado señales de esta tendencia, con los principales índices bursátiles de Wall Street ganando cerca del 2,5%, impulsados por las expectativas de una distensión en la relación comercial con China. Esta mejora del sentimiento inversor también favoreció a otros segmentos del mercado de renta fija, con los bonos Investment Grade y High Yield avanzando un 0,4%, mientras que los bonos de mercados emergentes subieron un 1,2%. Las declaraciones del secretario del Tesoro, Scott Bessent, calificando el conflicto arancelario con China como «insostenible» y anticipando una posible desescalada, refuerzan esta narrativa de distensión comercial.
