El Tesoro Nacional logró colocar exitosamente USD 1.000 millones del Bonte 2030 a una tasa nominal anual del 29,5%, recibiendo ofertas por un total de USD 1.694 millones que evidencian una demanda robusta por parte de los inversores. Esta operación representa un hito significativo al constituir la primera emisión dirigida a inversores no residentes desde el inicio de la gestión del presidente Javier Milei.
La licitación del miércoles permitió al Tesoro lograr un rollover completo de sus vencimientos, incluyendo tanto pagos de cupones como amortizaciones correspondientes a la semana previa. Las tasas obtenidas se alinearon con la curva vigente del mercado, lo que sugiere una recepción favorable de la estrategia de financiamiento del gobierno actual y una normalización gradual de las condiciones de acceso al mercado internacional de capitales.
Este resultado cobra especial relevancia en el contexto de la política económica implementada por la nueva administración, ya que demuestra la capacidad del país para atraer capital extranjero en un momento de transición política y económica. La participación de inversores no residentes señala una recuperación de la confianza internacional en los instrumentos de deuda argentina, factor crucial para el financiamiento de las necesidades fiscales del Estado y la estabilización de las condiciones macroeconómicas del país.