La Secretaría de Finanzas ejecutó ayer una colocación fuera del calendario regular, adjudicando ARS 3,788 billones, prácticamente la totalidad de las ofertas recibidas que ascendieron a ARS 3,799 billones. Esta operación extraordinaria tuvo como objetivo absorber el exceso de pesos en el mercado tras un rollover de deuda limitado al 61%.
El instrumento seleccionado fue una letra capitalizable a tasa TAMAR + 1% TNA, medida que se complementó con el incremento de 5 puntos porcentuales en los encajes del BCRA, la extensión de plazos de integración y el refuerzo de sanciones. Estas acciones coordinadas buscaron retirar liquidez excedente del sistema financiero y estabilizar las tasas de interés de corto plazo.
Los efectos de la medida fueron inmediatos en el mercado monetario. La tasa de caución a un día experimentó una caída significativa, mostrando desajustes por la presión de los nuevos encajes y la operativa adelantada de bancos y fondos. Esta situación derivó en un exceso de liquidez de último minuto, dejando al mercado en búsqueda de alternativas para colocar los fondos disponibles y generando volatilidad en las tasas de interés de muy corto plazo.