El miembro de la Junta de Gobernadores de la Reserva Federal, Philip Jefferson, sugirió adoptar un enfoque cauteloso respecto a los próximos pasos en política monetaria, a pesar de los recientes datos favorables de inflación. En declaraciones realizadas durante un evento académico, Jefferson enfatizó que «aunque estamos viendo progresos significativos en el control de la inflación, aún no hemos alcanzado consistentemente nuestro objetivo del 2% en el indicador PCE subyacente».
Jefferson, quien tiene derecho a voto permanente en el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC), señaló que «una postura prudente requiere evaluar más datos antes de considerar ajustes en la tasa de referencia». Sus comentarios sugieren que, si bien el banco central reconoce la mejora en las condiciones inflacionarias, mantiene reservas sobre la solidez y sostenibilidad de esta tendencia, especialmente considerando factores como la fortaleza del mercado laboral y potenciales presiones en los salarios.
Los mercados financieros reaccionaron a estas declaraciones moderando ligeramente las expectativas sobre el ritmo de recortes de tasas para lo que resta del año. Actualmente, los swaps de tasas de interés indican una probabilidad del 65% de un primer recorte en la reunión de septiembre, seguido potencialmente por una segunda reducción en diciembre. Esta postura más conservadora contrasta con las recientes presiones políticas para acelerar el ciclo de flexibilización monetaria, subrayando la determinación de la Fed de mantener su independencia en la toma de decisiones basadas en datos económicos y no en consideraciones políticas.