El Producto Bruto Interno de Estados Unidos registró su primera contracción en tres años, cayendo un 0,2% trimestre contra trimestre anualizado durante el primer trimestre de 2025. La cifra mostró una leve mejora respecto a la estimación previa de -0,3%, impulsada principalmente por una inversión fija más sólida que logró contrarrestar parcialmente la debilidad del consumo y el mayor impacto negativo del comercio exterior.
El consumo estadounidense experimentó una notable desaceleración, creciendo apenas un 1,2%, su menor ritmo desde el segundo trimestre de 2023. Esta moderación en el gasto de los consumidores contrasta con el fuerte incremento de las importaciones, que crecieron un 42,6% trimestre contra trimestre, en respuesta directa a los aranceles anunciados por el gobierno de Trump. Esta dinámica refleja el comportamiento anticipatorio de empresas e importadores que buscaron acelerar sus compras antes de la implementación de nuevas medidas proteccionistas.
El gasto del gobierno federal cayó un 4,6% trimestre contra trimestre, representando su mayor descenso desde inicios de 2022, mientras que la inversión fija creció un robusto 7,8% y las exportaciones aumentaron un 2,4%. En el frente laboral, las solicitudes iniciales de subsidio por desempleo aumentaron en 14.000 respecto a la semana anterior, alcanzando las 240.000 en la semana finalizada el 24 de mayo, superando las expectativas del mercado. Las solicitudes continuas también subieron significativamente hasta 1.919.000, el nivel más alto desde noviembre de 2021, reforzando las señales de un posible debilitamiento del mercado laboral en un contexto de creciente incertidumbre económica.