Se espera que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de China registre una caída mensual del 0,1% en junio, mejorando respecto al -0,2% del mes anterior. Esta evolución mantendría la inflación interanual cerca del 0%, reflejando la persistente debilidad en la demanda interna de la segunda economía mundial.
Los datos del IPC chino son observados con atención por los mercados globales, ya que la deflación sostenida en China podría tener implicaciones significativas para la economía mundial. La debilidad de la demanda interna china contrasta con las presiones inflacionarias observadas en otras economías desarrolladas, evidenciando los desafíos específicos que enfrenta el gigante asiático.
La Reserva Federal también dará a conocer hoy las expectativas de inflación a un año correspondientes a junio, proporcionando una perspectiva adicional sobre las tendencias inflacionarias globales. El contraste entre las dinámicas inflacionarias de China y Estados Unidos ilustra la complejidad del panorama económico internacional y sus implicaciones para las políticas monetarias respectivas.