El último informe del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE) reveló que la inflación de Brasil alcanzó el 5.26% interanual, el nivel más alto registrado desde marzo de 2023. En la medicion mensual, el índice subió un 0.64%, en línea con las proyecciones de los analistas del mercado financiero.
El aumento se debe, principalmente, a la escalada en los precios de los alimentos y el sector energético. La mayor presión inflacionaria podría dificultar la estrategia del Banco Central de Brasil, que ha intentado mantener una política monetaria flexible para fomentar el crecimiento económico sin descuidar la estabilidad de los precios.
En respuesta a estos datos, el real brasileño se depreció un 0.7% frente al dólar, mientras que la Bolsa de Valores de São Paulo registró una leve caída en las acciones del sector minorista.