El dólar spot experimentó una fuerte baja hasta los $1.125, impulsada principalmente por la reciente medida del Banco Central de la República Argentina que flexibiliza las condiciones para inversores extranjeros. La decisión permite a los inversores no residentes repatriar nuevas inversiones de portafolio sin necesidad de autorización previa, estableciendo como único requisito una permanencia mínima de seis meses.
En paralelo, el tipo de cambio A3500, que promedia las operaciones diarias y sirve como referencia oficial, cerró en $1.172,8, mostrando también una tendencia a la baja aunque menos pronunciada que la del mercado spot.
Los dólares financieros profundizaron su tendencia bajista, con el MEP registrando una caída del (-5,8%) hasta los $1.165,9 y el CCL descendiendo un (-5,1%) hasta los $1.180. Estos movimientos han reducido significativamente la brecha cambiaria, dejándola en apenas un 0,6% respecto al dólar oficial, uno de los niveles más bajos en los últimos años.