La utilización de la capacidad instalada industrial alcanzó el 54,4% durante marzo, mostrando una leve mejoría respecto al 53,4% registrado en el mismo mes de 2023. Este indicador, que refleja el nivel de actividad económica en el sector manufacturero, muestra un panorama heterogéneo entre los distintos rubros industriales, con algunos sectores exhibiendo signos de recuperación mientras otros continúan operando muy por debajo de su potencial.
Los sectores que lideraron en términos de aprovechamiento de su capacidad productiva fueron la refinación de petróleo con un destacado 76%, seguido por la industria del papel y cartón que utilizó el 68,2% de su capacidad instalada, y el sector de alimentos y bebidas que operó al 57,6%. En contraste, los niveles más bajos de utilización se observaron en la industria textil con apenas un 41%, el sector tabacalero con un 41,2% y la producción de caucho y plástico con un 42%, evidenciando las dificultades persistentes que enfrentan estos rubros para incrementar su producción.
El análisis interanual revela que las industrias metálicas básicas lideraron la recuperación con un notable incremento de 14,3 puntos porcentuales, impulsadas principalmente por un aumento del 37% en la producción de acero crudo. También experimentaron mejoras significativas los sectores de metalmecánica que avanzó 4,8 puntos porcentuales y alimentos y bebidas con un incremento de 3,1 puntos porcentuales, beneficiados por aumentos en la molienda de soja (+11%) y en la producción de leche (+15,9%). Sin embargo, no todos los sectores mostraron evolución positiva, destacándose la pronunciada caída en la industria química, que pasó de operar al 64,9% de su capacidad a solo el 53,8%, afectada principalmente por las interrupciones en el suministro de gas que impactaron severamente en el polo industrial de Bahía Blanca.