La brecha cambiaria continuó expandiéndose durante la jornada del jueves, alcanzando niveles que vuelven a generar preocupación en el mercado financiero argentino. El dólar spot registró un avance significativo del 3,1% hasta ubicarse en $1.423, mientras que el contado con liquidación (CCL) mostró un incremento más moderado del 1,9% y cerró en $1.575. De esta forma, la diferencia entre ambos tipos de cambio finalizó en 10,7%, consolidando una brecha de dos dígitos que no se observaba desde hace varias semanas.
El comportamiento del dólar spot durante la rueda operativa llamó particularmente la atención de los operadores del mercado. El tipo de cambio se mantuvo prácticamente sin variaciones en $1.425 durante toda la sesión, una estabilidad poco común en un contexto de alta volatilidad cambiaria. Esta situación sugiere que el Tesoro Nacional habría intervenido activamente mediante ventas de divisas para sostener ese nivel de precio y evitar una disparada mayor. Según estimaciones de operadores del mercado, los montos operados habrían oscilado entre US$300 y US$450 millones, aunque hasta el momento no se ha obtenido confirmación oficial por parte de las autoridades económicas respecto a estas cifras.
En términos comparativos con la banda cambiaria establecida por el Banco Central, el dólar oficial quedó posicionado 3,9% por debajo del techo de la banda, que se ubica en $1.481,2. Sin embargo, el contado con liquidación finalizó la jornada 6,3% por encima de ese nivel de referencia, evidenciando la presión que continúa ejerciéndose sobre los dólares financieros y la persistencia de la demanda por parte de inversores y ahorristas que buscan cobertura ante la incertidumbre económica. Esta divergencia entre el tipo de cambio oficial y los paralelos representa uno de los principales desafíos para la política cambiaria del gobierno en el corto plazo.