Tras un debut sólido del esquema de bandas en el tipo de cambio argentino, el mercado comenzó a experimentar cierta volatilidad cambiaria en las últimas jornadas. El dólar mayorista cerró la semana en $1.170 mientras que el MEP finalizó en $1.184, mostrando un estrecho diferencial entre ambas cotizaciones.
Los operadores del mercado se mantienen atentos a dos factores fundamentales que podrían definir la dinámica cambiaria en el corto plazo. Por un lado, el volumen de liquidación del sector agrícola, que tradicionalmente aporta un flujo importante de divisas al mercado local. Por otro lado, el eventual ingreso de capitales extranjeros habilitados a operar en el Mercado Libre de Cambios (MLC), lo que podría aportar mayor oferta de divisas.
El Banco Central continúa acumulando reservas, que alcanzaron los USD 39.165 millones, un factor que brinda cierto respaldo al nuevo esquema cambiario. Este fortalecimiento de las reservas internacionales ha sido uno de los pilares que ha permitido implementar el sistema de bandas, buscando generar mayor previsibilidad en la cotización del dólar tras meses de tensión cambiaria.