Los principales índices de Wall Street cerraron con resultados mixtos en una jornada marcada por la decisión de política monetaria de la Reserva Federal. El Dow Jones fue el único indicador que logró mantenerse en territorio positivo con un avance del 0,6%, mientras que el Nasdaq y el S&P 500 registraron caídas moderadas de 0,3% y 0,1% respectivamente.
Los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense experimentaron un incremento generalizado en toda la curva de plazos. La tasa a 10 años avanzó 5 puntos básicos hasta 4,08%, mientras que la de 2 años subió la misma magnitud hasta 3,55%. Como resultado de estos movimientos, el spread entre ambos tramos se ubicó en 53 puntos básicos, reflejando las expectativas del mercado sobre la evolución futura de la política monetaria.
En el frente corporativo, se destacaron movimientos significativos en el sector tecnológico. Las acciones de Nvidia subieron más del 3% en la negociación previa a la apertura del mercado, consolidando su posición como una de las empresas más valoradas del sector. Por su parte, Intel experimentó un salto extraordinario de casi 29% después del anuncio de que Nvidia invertirá $5 mil millones por una participación minoritaria en la compañía, una operación que podría redefinir las alianzas estratégicas en la industria de semiconductores.