Tesla registró en agosto su menor cuota de mercado dentro del segmento de vehículos eléctricos estadounidense desde 2017, cayendo al 38% según cifras de Cox Automotive. La compañía de Elon Musk, que en su momento llegó a dominar más del 80% del segmento, enfrenta una competencia cada vez más intensa de fabricantes tradicionales.
Este retroceso marca la primera vez que la participación de Tesla baja del 40% desde octubre de 2017, cuando apenas comenzaba a incrementar la producción del Model 3. Mientras competidores como Hyundai, Honda y Volkswagen lograron avances en ventas de entre 60% y 450% en julio, Tesla apenas aumentó un 7% ese mes y 3,1% en agosto, muy por debajo del 14% que creció el mercado en su conjunto.
La firma ha reorientado su apuesta hacia tecnologías que aún no se han probado en el mercado masivo. A esto se suma el inminente vencimiento de los créditos fiscales federales de $7.500 por vehículo a fines de septiembre, factor que podría agravar la presión sobre sus márgenes operativos y competitividad en el mercado estadounidense de vehículos eléctricos.